09 agosto 2009

...y entre el cielo guiado de estrellas, sucumbía a la condena, ahogandome en la espuma espesa sin poderte ver, extrañando el beso, de tu cuerpo junto al mío, suave aliento enamorado que me embriaga de placer...y abriendole en susurros mi doncello, te suspiraba aquella noche de invierno, tratando de consolar al silencio de no oir tus besos danzandole a mi piel...y caminando entre la lluvia, fatigado sin tu amor, te escribía entre mis versos vida mía, una dicha que sin tu sonrisa se ausenta de color.